La intención de El Alfa era llenar el Estadio Olímpico en su totalidad y a puro dembow, y así  ocurrió. Este sábado 16 de julio miles de fanáticos del género disfrutaron de una noche en la que el Alfa hizo del dembow una leyenda, al ser el primer artista urbano en llenar este espacio y con este género. 

 

Este show, el cual El Alfa dedicó entre tantas cosas, a Dios, a la Republica Dominicana y a la familia, puso en evidencia la gran cantidad de fanáticos que no solo apuestan al artista en sí, sino, al género como tal. 

 

El dembow se hizo sentir  en el público antes de que la tarima estuviera encendida. Las puertas abrieron a las 5 de la tarde y desde esa hora, cientos de fanáticos del género empezaron a llegar. Dos horas después, ya había una cantidad significativa ocupando el Estadio. 

De distintas edades, desde niños hasta adultos, y una gran cantidad de jóvenes se dieron cita al Estadio que El Alfa veía cómo un sueño lejano, más no imposible de cumplir. Apostando a él, con determinación, entrega y disciplina, El Alfa logró lo que se propuso; ser uno de los pocos artistas en convocar a miles de personas en el Estadio Olímpico. 

Más de 40,000 personas se dieron cita en el Estadio Olimpico, sumando el dembow a la lista de géneros que han logrado mover mulitudes. Los otros han sido, la bachata de Romeo, el Merengue de Juan Luis Guerra y la Coco Band, el show infantil de Icha y ahora, el Dembow del Alfa.

 

La noche inició con la Animacion del comunicador Joel López, quien logró con su participación el challenge “Gogo Dance” más grande del mundo, invitando al público en el estadio acompañarlo hacer el baile de uno de los trend más virales del momento. 

Aprovechando su intervención, también brindó con el público y una cerveza en la mano, por la carrera de El Alfa y por esa noche tan especial para el artista. 

La artista dominicana La Gabi, fue la primera artista en subir a escena y quien, con su auténtico estilo y peculiar voz, abrió el largo repertorio de la noche.

 

La hora más esperada llegó. Un audiovisual que mostró algunos videos de los inicios de la carrera artística de Enmanuel Herrera, nombre real del artista, desde el 2008 hasta la fecha, dando un paseo por su trayectoria, dejó el escenario listo para recibir al protagonista de la noche.

Entre tantas emociones que se experimentaron en el concierto, la ternura fue una de ellas. El Alfa presentó a sus dos primeros invitados de la noche y los más especiales, quienes le habían pedido el permiso y la oportunidad de acompañarlo esa noche en tarima. 

“Ahora voy a invitar a mis dos invitados especiales, que son lo que más amo, mis hijos”, fue el llamado para que Fendi y Enmanuel, sé integrarán con su padre en la tarima. 

“Lo más importante que puede tener un hombre y una mujer, son sus hijos, quiero que el que sé sienta orgulloso de tener su familia, a su mamá viva, le haga una buya ahora”, dijo el exponente antes de cantar “Coronao’ junto a sus hijos. 

Dando continuidad a la ternura y la muestra de orgullo por la familia, el hijo mayor de El Alfa, Fendi, de 9 años, correspondió al exponente con unas hermosas palabras y agradeció al público por el apoyo que le han dado a la carrera de su padre. 

“Quiero decir algo, gracias por el apoyo que le han dado a mi papá, gracias por convertirlo en un Artista”. 

 

“Vamos a meter mano internacionalmente”, decía el muchacho de Haina, en el video que llevó al público a  sus inicios, cuando apenas tenía 16 años de edad y predijo lo que pasaría con su carrera artística. 

 

“A mi hay que darme banda de camión”, una expresión que sale de su disco lanzado en 2017 “Banda de Camión” y que hace referencia al reconocimiento que se le hace a una persona cuando le está yendo bien. Estas fueron también, de las primeras palabras de El Alfa al subir a tarima al rededor de las 10 de la noche. 

Tras introducir con dos canciones su espectáculo, la segunda de ellas 4K, del 2020 y uno de sus discos más conocidos mundialmente, gracias a la plataforma tiktok y al influencer mexicano Kunno, quien hizo bailar al mundo esta canción con su particular y empoderada caminata, El Alfa puso espectáculo en manos de Dios diciendo: “inicio este show en el nombre de Dios, Padre, Hijo y Espíritu Santo, amén”, seguido de una presignación.  

 

Tras este momento de calma, la euforia en el público siguió a ritmo de “Singapur”. A partir de esta canción, la modernidad y esplendor de la escenografía deslumbró al público, sin espacio a envidiar cualquier espectáculo internacional, tal y como había predicho Saymon Díaz, productor del evento. Muchos colores, luces y fuego, lograron agregarle emoción al concierto.